Colonia en plena protesta: ¡La alianza pacifista exige el fin del servicio militar obligatorio!
Protesta de la alianza pacifista en Colonia contra el servicio militar obligatorio: alrededor de 70 participantes exigen una política de paz y critican los planes de armamento.

Colonia en plena protesta: ¡La alianza pacifista exige el fin del servicio militar obligatorio!
Unas 70 personas se reunieron hoy frente a un centro de carrera de la Bundeswehr en Colonia para protestar contra la amenaza de restablecer el servicio militar obligatorio. La acción, organizada por la alianza contra la guerra “Rheinmetall disarmen”, se desarrolló en un ambiente tranquilo, según la policía. Los participantes formaron una sentada frente a una de las puertas de acceso y dejaron en claro: “¡No estamos preparados para la guerra!” Este bloqueo marcó el inicio de los “días de acción” previstos contra el servicio militar obligatorio. Un portavoz de la policía afirmó que los servicios de emergencia habían "rodeado" a los manifestantes para evitar posibles disturbios. La protesta se produjo en el contexto de las aspiraciones políticas actuales, ya que el gobierno federal quería tomar decisiones sobre un nuevo servicio militar el mismo día, lo que avivó aún más a los manifestantes. En el edificio en el que se manifestaron se encuentra la coordinación central de planificación de personal de la Bundeswehr, que también sería responsable del reclutamiento si se volviera a imponer el servicio militar obligatorio.
Debate sobre armamento en Alemania
El debate sobre el servicio militar obligatorio en Alemania ha cobrado un nuevo impulso desde el ataque ruso a Ucrania en febrero de 2022. En este contexto, el ministro federal de Defensa, Boris Pistorius, anunció un nuevo modelo de servicio militar en 2024. La sociedad se debate entre el deseo de una Bundeswehr fuerte y la crítica de las prioridades políticas, cada vez más orientadas al rearme y la militarización. Según la alianza contra la guerra, el aumento previsto del presupuesto de defensa hasta aproximadamente el 5% del producto interior bruto seguirá siendo una evolución alarmante. Especialmente el próximo sábado, 30 de agosto de 2025, en el Heumarkt de Colonia se prestará especial atención a la industria armamentística: desde el punto de vista financiero, no sólo se abordará como tema el rearme, sino también la militarización.
En la cumbre de la OTAN se decidió que casi la mitad del presupuesto federal debería destinarse a armamento y estructuras militares. Esto significa que áreas sociales como la atención sanitaria, la guardería y las funciones municipales podrían verse afectadas. Mucha gente expresa preocupación por el aumento de los alquileres, las jornadas laborales más largas y los recortes de empleos. Los responsables políticos, incluido el Canciller Merz, piden a Alemania que asuma un papel de liderazgo militar en Europa. Pero las críticas van en aumento: las voces a favor de la paz y las protestas contra la creciente militarización a menudo quedan desacreditadas.
El pasado del servicio militar obligatorio
El servicio militar obligatorio tiene una historia turbulenta en Alemania. Se introdujo en Prusia en 1813 y experimentó numerosos puntos de inflexión, incluido el Tratado de Versalles después de la Primera Guerra Mundial y su reintroducción por el régimen nazi en 1935. En la República Federal, el servicio militar obligatorio se introdujo en 1956 como parte de un sistema controlado democráticamente hasta que fue suspendido en 2011 por Karl-Theodor zu Gutenberg. La suspensión tuvo consecuencias importantes: el número de tropas cayó por debajo de los 185.000 y la relación entre la sociedad y la Bundeswehr se debilitó.
El debate actual es complejo. Según lo previsto por el gobierno federal, a partir de 2025 se implementará un nuevo servicio militar como servicio preparado voluntario pero obligatorio. Los hombres deben completar un cuestionario, mientras que las mujeres pueden ser voluntarias. A pesar de la aprobación del nuevo modelo por parte del SPD, existen considerables preocupaciones entre los ciudadanos que tienen dudas duraderas sobre la equidad de la Bundeswehr en el servicio militar y su competencia en el entrenamiento.
Con todas estas consideraciones, el servicio militar obligatorio se encuentra en un punto de inflexión crucial. La combinación de voluntariedad y un posible regreso al servicio obligatorio podría aumentar las tensiones sociales. La presión sobre el gobierno federal continúa creciendo porque es necesario superar desafíos tanto económicos como logísticos.
Las protestas y debates muestran claramente que la sociedad se enfrenta al desafío de encontrar un equilibrio entre la seguridad y los valores sociales. Incluso si los planes de militarización parecen irreversibles, no se debe subestimar la resistencia de los ciudadanos.