Otro espía: estudiante chino en Tum a la vista de la oficina del fiscal público

Otro espía: estudiante chino en Tum a la vista de la oficina del fiscal público

Chorweiler, Deutschland - A la sombra de la Universidad Técnica de Munich (TUM), se elabora un escándalo de espía grave. Se sospecha que un estudiante chino ha transmitido información secreta que es particularmente confidencial. La Oficina del Fiscal General de Múnich ha comenzado la investigación dirigida contra el único acusado. En particular, el enfoque se centra en la violación de los secretos privados y los secretos de servicio: un delito que a menudo se asocia con el espionaje de negocios, como .

El aumento de los estudiantes chinos en las universidades alemanas, muchas de ellas con becas estatales y conexiones de monitoreo con el régimen chino, da lugar a preocupación. Las estrategias para el espionaje de negocios se diversifican y difícilmente se pueden distinguir de la investigación de mercado puramente privado. Actualmente se inscriben más de 40,000 estudiantes chinos en Alemania, y muchos están profundamente entrelazados en las estructuras de control estatal.

El cambio en las actividades de espía de la naturaleza económica a la científica no se puede pasar por alto. De acuerdo con Tagesschau.de , las autoridades de seguridad alemanas bajo la dirección de Thomas Haldenwang, el jefe de la oficina federal para la oficina constitucional, han observado este desarrollo. La amenaza de China se clasifica tan desafiante como la de Rusia, pero en un contexto completamente diferente.

Detrás de escena, los servicios secretos chinos son cada vez más agresivos, y la conexión entre los proyectos de investigación militar y civil en China incluye la posibilidad de espiar. La Ley del Servicio de Secretario Nacional permite a los poderes de vigilancia de lejano en China, lo que hace que sea casi imposible distinguir entre los intereses civiles y militares.

En esta situación compleja y preocupante, las empresas e instituciones de investigación en Alemania deben permanecer atentos y desarrollar estrategias adecuadas para proteger su conocimiento secreto. El caso del estudiante TUM solo podría ser la punta del iceberg en un campo de espía cambiante, que continúa aceptando nuevas dimensiones y enfrenta desafíos que van mucho más allá de lo que muchos consideraron posible.